El sábado 4 marzo comenzó la retrogradación de Venus y permanecerá en esa condición hasta el Sábado de Gloria, 15 de abril. Las seis semanas de esta retrogradación planetaria coinciden con la Cuaresma cristiana, pues se inició tres días después del Miércoles de Ceniza, y culminará el último día de la Semana Santa.
Ciclo de Venus Retrógrado en el Signo de Aries
Venus es el planeta más cercano a la Tierra, ubicado a unos 39 millones de kilómetros. Por eso, se ve -antes del amanecer o poco después del ocaso- como la más brillante estrella del firmamento.
Nuestro planeta vecino tiene una órbita más reducida que la de la Tierra, generando por ello, una menor duración de su movimiento de traslación (su “año”), en comparación con el nuestro.
Por esa condición, siempre observaremos a Venus transitando el espacio sideral cerca del Sol, sin poder alejarse de él más allá de los 46° de longitud.
En la mitad de su período de retrogradación, transcurridos veintiún días de haber comenzado éste, Venus es alcanzado por el Sol, y se produce la conjunción entre ellos, marcando así el final de un ciclo y el inicio de otro nuevo.
El ciclo sinódico de Venuscon el Sol se completa en 584 días, lapso en que se producen tres de esas conjunciones.
Movimiento Retrógrado de Venus
El planeta que lleva el nombre de la diosa del Amor y la Belleza se alinea con el Sol y la Tierra en tres ocasiones a lo largo de 584 días, provocando trío de conjunciones con el Sol, que se alternan como inferior y superior sucesivamente.
En esos días de conjunción es imposible observar su resplandor en el firmamento en ningún momento, pues su cercanía al Sol, con el que comparte la misma posición zodiacal, lo lleva a acompañarlo en su aparición y desaparición en la bóveda celeste.
Una de ellas es denominada inferior y se produce cuando Venus se ubica entre Sol y Tierra, estando más cerca de nosotros, su brillo es mayor, con menor velocidad y en movimiento retrógrado.
La otra, conocida como superior, ocurre 290 días después, cuando el planeta pasa por detrás del Sol, en movimiento directo, a más velocidad y distancia, y con menor resplandor.
En cada una de estas dos conjunciones es imposible percibir a Venus desde la Tierra, al quedar ocultado por la incandescencia del Sol
Esas dos conjunciones entre ambos astros determinan la división del ciclo completo en dos mitades de igual duración, en las que Venus aparece en la esfera celeste en horarios y puntos cardinales opuestos.
Los Tipos de Venus
El levantamiento del mapa natal astral de un individuo, o de un momento dado, nos indica tres tipos posibles de Venus: Lucifer, Hespérides o conjunción.
Según su presencia en el cielo: si brilla al amanecer por el este (Lucifer); si lo hace al atardecer, por el oeste (Hespérides); o si no está visible (conjunción).
Cada uno de esos tipos venusinos representa una forma diferente de comportamiento afectivo-sentimental-sensorial-sensual.
Venus Lucifer
Venus aparece como una estrella que antecede la salida del Sol, cuando está a una menor longitud que éste en la rueda zodiacal. Brilla en la madrugada por el horizonte oriental.
Recibe el nombre de Lucifer (el que ilumina, resplandece o “el que transporta la luz“), también conocida como estrella matutina.
Se le asocia con el impulso afectivo y sensual. Se halla en esa condición desde su conjunción inferior -conVenus retrógrado– hasta hasta su siguiente conjunción (superior), nueve meses más tarde.
Venus Hespérides
Venus surge como una estrella que sigue a la puesta de Sol, cuando está a una longitud mayor que éste, en el zodíaco, brillando poco después del crepúsculo, por el horizonte occidental.
Recibe el nombre de Hespérides, en alusión a las ninfas que cuidaban cada tarde, un jardín de manzanos y sus frutas doradas, ubicado en occidente. Se le conoce también como estrella vespertina. Se le asocia con el sentimiento maduro y consistente, y el disfrute del placer apacible.
Se halla en esa condición desde una conjunción superior -con Venus directo y rápido– hasta la siguiente conjunción (inferior), nueve meses después.
En dos direcciones
También hay dos formas muy diferentes de expresarse la energía de Venus: cuando el planeta está en movimiento directo o cuando está en modo retrógrado. En el primer caso, representa la manifestación natural de su energía; mientras que el segundo, indica una deformación o dificultad para la expresión de su cualidad.
La Retrogradación de Venus es la menos frecuente de todas las retrogradaciones planetarias. Se halla en esa situación por un período de apenas seis semanas, cada dieciocho meses; por tanto, retrograda un promedio de 42 días al año, lo que quiere decir, que de cada cien nacimientos. sólo 11 de ellos ocurren con Venus Retrógrado.
En síntesis, podría decirse que el planeta VENUS expresa su energía de dos formas: como Lucifer y como Hespérides; y de dos modos, en directo y retrógrado. Por tanto, al combinarlos pueden presentarse cuatro tipos:
- Lucifer Retrógrado
- Lucifer Directo
- Hespérides Directo
- Hespérides Retrógrado
El 92% del tiempo se halla en Directo.
La mitad del tiempo (290 días) se manifiesta como Estrella del amanecer (Lucifer) y la otra mitad como Lucero de la tarde (Hespérides). Sólo pocos días de su ciclo, Venus se vuelve invisible, cuando forma la conjunción con el Sol. Ése es el momento de la transición entre sus dos principales expresiones.
El Ciclo de Venus
En el siguiente cuadro pueden apreciarse las posibles combinaciones de los cuatro tipos y modos de Venus, su duración en el tiempo y su aplicación al nuevo ciclo que está por comenzar.
El nuevo ciclo de Venus se extenderá desde el 25 de marzo del presente año hasta el 26 de octubre del año 2018, alcanzando su clímax el 09 de enero de 2018, con una duración de año y medio (584 días).