El principio fundamental detrás del trato a los animales en el Judaísmo es la prevención de ba’alei Jaim tza’ar, el sufrimiento de los seres vivos. El Judaísmo pone gran énfasis en el trato adecuado a los animales.
Animales en el Judaísmo — Trato a los animales en la Ley Judía
La crueldad innecesaria hacia los animales está estrictamente prohibida, y en muchos casos, a los animales se les concede la misma sensibilidad que a los seres humanos.
Tza’ar ba’alei Jaim: Crueldad con los Animales
Esta preocupación por el bienestar de los animales en el judaísmo es poco usual en la civilización occidental. La mayoría de las naciones civilizadas no aceptó este principio hasta épocas más recientes.
La crueldad hacia los animales no se prohibió sino hasta el siglo XIX, y aún ahora no se toma muy en serio en muchos países.
El Judaísmo no expresa ninguna opinión definitiva acerca de si los animales han experimentado realmente el dolor físico o psicológico de la misma manera que lo hacemos los humanos.
Sin embargo, el Judaísmo siempre ha reconocido el vínculo entre la forma en que una persona trata a los animales y la forma en que trata a los seres humanos.
Una persona que es cruel con un animal indefenso
Sin duda, será cruel con las personas vulnerables. La psicología moderna confirma este concepto, con muchos estudios que comprueban una relación entre la crueldad hacia los animales en el niño y la violencia criminal en el adulto, si no en todos los casos, sí en la mayoría.
En la Biblia, los que cuidan de los animales son héroes, mientras que los que cazan animales son villanos. Jacobo, Moisés y el Rey David eran pastores que cuidaban de los animales (Gén. 30, ex. 31, I Sam. 17).
El Talmud establece específicamente que Moisés fue elegido para su misión de liberar al Pueblo Judío de la esclavitud en Egipto, debido a su habilidad en el cuidado de los animales. Dios le dijo a Moisés: “Puesto que tú eres misericordioso con el rebaño de un hombre, serás el pastor de mi rebaño, Israel.”
Rebecca
Rebecca, fue elegida como esposa de Isaac por su bondad con los animales. Cuando el siervo de Abraham le pidió agua, ella se ofreció a darle de beber a sus camellos también, y así demostró ser una esposa digna (Gen. 24).
Por otra parte, los dos cazadores en la Biblia, Nimrod y Esaú , son descritos como villanos. El Talmud cuenta la historia de un gran rabino, Judá Ha-Nasi , que fue castigado con años de cálculos renales y otras enfermedades dolorosas porque fue insensible al terror de un ternero que llevaban al sacrificio.
Se curó años más tarde, cuando demostró bondad con los animales. (Talmud Baba Metzia 85 bis)
En la Torá, a la humanidad se le dio dominio sobre los animales (Gén. 1:26), lo que nos da el derecho a utilizar animales para satisfacer necesidades legítimas como alimento y vestido. La carne puede consumirse como alimento y las pieles de los animales se pueden utilizar para ropa.
Sin embargo, el dominio no nos da el derecho a causar dolor y destrucción indiscriminada. Se nos permite utilizar a los animales en el Judaísmo de esta forma sólo cuando hay una legítima necesidad y debemos hacerlo de manera que cauce al animal el menor sufrimiento.
La matanza kosher está diseñada para ser tan rápida e indolora como sea posible, y si hubiera algo que pudiera causar dolor (por ejemplo, una muesca en el cuchillo de sacrificio o un retraso en el corte), la carne no se puede consumir.
La caza deportiva está prohibida por la Ley Judía, lo mismo que el sufrimiento animal como entretenimiento.
Derechos de los animales en el judaísmo
En la Ley Judía, los animales tienen algunos de los derechos de los que gozan los seres humanos. Los animales descansan en Shabat, como hacen los seres humanos (Ex. 20:10).
Está prohibido poner bozal al buey para evitar que coma mientras está trabajando en el campo (Deut. 25:4), pues él debe poder comer, al igual que los trabajadores humanos, de los productos que se cosechan (Deuteronomio 23:25-26 ).
Varios mandamientos demuestran preocupación por el sufrimiento físico o psicológico de los animales. No se puede arar un campo con animales de diferentes especies (Deut. 22:10), porque esto sería un muy duro para los animales.
Se debe liberar de la carga a un animal en problemas, incluso si no somos los dueños, conozcamos o no al propietario. (Éxodo 23:5;. Deuteronomio 22:4).
No está permitido matar a un animal en el mismo día del sacrificio de su cría, (Lev. 22:28), y se ordena específicamente enviar afuera delo gallinero a una madre gallina (o cualquier otra ave hembra) antes de tomar sus huevos (Deuteronomio 22:6-7), por la angustia que esto causa el animal.
Mas aún, la Torá dice específicamente que una persona que envía afuera del gallinero al ave madre para que no vea cuando toman sus huevos, será recompensado con una larga vida.
Esta recompensa es precisamente la misma que se otorga por honrar al padre y a la madre (Éxodo 20:12;. Deuteronomio 5:16), y por la observancia de la Torá y todos sus preceptos (Deut. 04:40). Esto da una idea clara de la enorme importancia de esta ley, pues esta recompensa de larga vida solo se otorga en esos tres casos.
Se nos permite violar el Shabat en alguna medida limitada para rescatar a un animal con dolor o en riesgo de morir. Por ejemplo, podemos moverlos o levantarlos si tienen dolor, mover objetos que de otra manera no se permitiría tocar en Shabat para aliviar su dolor y medicarlos.
En el Talmud, los rabinos ordenaron que una persona no puede comprar un animal a menos que haya tomado medidas para que no le falte el alimento, y que una persona debe alimentar a sus animales antes de alimentarse a sí mismo. (interpretación Deut. 11:15).
Mascotas y animales en el judaísmo
La Ley Judía no prohíbe tener mascotas y, de hecho muchos judíos religiosos tienen perros, gatos u otros animales domésticos.
Al igual que a todos los animales, la Ley ordena alimentar a nuestras mascotas antes que a nosotros mismos, y además, como los demás animales, los animales domésticos tienen derecho a descanso del sábado, por lo tanto no se le puede pedir al perro que traiga el periódico en Shabat, etc.
Está permitido darles de comer alimentos que no sean kosher a nuestros animales de compañía, siempre y cuando no lo consuman los humanos de la casa.
Es una violación a la prohibición general de Jaim ba’alei tza’ar, el alterar física o quirúrgicamente a un animal de compañía de cualquier manera, sin una legítima necesidad médica. Por ejemplo, quitar las garras a los gatos y cortar las orejas o las colas de los perros está prohibido.
Sin embargo, no existe una ley contra la posesión de un animal en esas condiciones, si fue operado antes de llegar a sus manos.
El judaísmo y los vegetarianos
La dieta vegetariana se consideraba lo ideal para la humanidad. Tengamos en cuenta que en Génesis 1:29, Dios da a la humanidad todas las frutas y hortalizas para la alimentación, pero nada de carne. La carne no está permitida hasta después del Diluvio (Génesis 9:3).
Incluso las ofrendas antes de ese tiempo, no implicaban la muerte de los animales: Un midrash (libro de rezos) tradicional indica que las ofrendas de Abel y Caín (Gén. 4) eran de lana y de lino.
Ciertamente, una dieta vegetariana simplifica el proceso de mantener la kasherut, ya que elimina la necesidad de separar la carne y los productos lácteos! (Véase el Kashrut).
Alimentos vegetarianos
La mayoría de los alimentos vegetarianos son kosher, de hecho, muchos vegetarianos que no comen Kosher se basan en certificaciones kosher para asegurarse de que los alimentos que compran son vegetarianos.
Frijoles, granos, frutas, verduras y productos lácteos que todos pueden comer y en cualquier combinación, y no requieren certificación kosher si no se procesan.
Si son procesados, se debe buscar una certificación confiable. Por ejemplo, yo no soy Kosher pero consumo gelatina Kosher certificada para asegurarme de que la grenetina utilizada sea vegetal y no animal.
Carne
Es tradicional comer carne para celebrar el Shabat y las festividades judías, pero no es un requisito. No hay día de fiesta o celebración religiosa para lo cual sea una mitzvá (mandamiento obligatorio) comer carne, y la mayoría de los alimentos simbólicos que se consumen en las festividades no son de carne.
De hecho, en Shavuot, es tradicional comer productos lácteos (que no se pueden comer con carne).
La carne es una parte tradicional del Shabat y las festividades para hacerlas especiales, pero mientras se trate de un platillo fuera de lo ordinario para mantener el ambiente festivo, no es necesario ni es requisito que sea hecho de carne.
Uso de partes de animales en el judaísmo
El único tema que puede causar conflicto para los vegetarianos en la religión judía, es el uso de partes de animales en el judaísmo con fines rituales. La Torá está escrita sobre pergamino hecho de piel animal, al igual que los rollos en una mezuzá y las filacterias para rezar o tefilím, que están hechas de cuero.
El Shofar que se toca en Rosh Hashaná (Año Nuevo) es un cuerno de carnero. La Ley Judía requiere de todo esto. ¿Qué puede hacer un vegetariano que cumple con la Ley Judía?
El sitio web de vegetarianos judíos JewishVeg señala que sólo un pequeño número de animales se utilizan para este fin, y comenta también que la Ley Judía nos permite hacer estos objetos rituales con animales que murieron por causas naturales.
También hay que tener en cuenta que los productos animales en el Judaísmo que se utilizan actualmente en la elaboración de estos objetos rituales, son meros subproductos de la vastísima industria de la carne.
Si llegara el momento en que la industria de la carne no ofreciera suficientes derivados, se pueden elaborar los objetos rituales judíos de animales que murieron por causas naturales, si necesidad de sacrificar a ninguno para este fin.
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