La psicoastrología es una corriente inglesa dentro del mundo de la astrología. Su premisa básica está fundamentada en los términos de la astrología tradicional, unida a la psicología desarrollada por Carl Gustav Jung. Primordialmente está enfocada al desarrollo personal.
El significado de la Luna en la carta astral
Nos muestra la forma de expresar nuestros sentimientos y de manifestarnos con nuestro entorno, atrae hacia nosotros cierto tipo de personas. Dicho de otra forma, con nuestra estructura mental, es decir, cómo pensamos atraemos una pauta o un tipo de persona u otra. Por ejemplo:
Si soy muy conservadora, tradicional, anticuada, hasta carca. ¿Cómo voy a atraer a una persona liberal, progre, abierto…? Le daría un yuyu. Lógico, ¿no? Jung también afirmaba que todos tenemos zonas oscuras en la psique (mente) que está a nivel del subconsciente: la sombra.
Son partes o sectores sombríos, ocultos que nos traban, limitan y evitan que evolucionemos. Sólo conociendo estas zonas, dándole luz podremos trascenderlas, es decir superarlas. Los grandes maestros de esta línea son Liz Green, Howard Sasportas, Richar Idemon, Stephen Arroyo, Dane Rudhyar, etc.
La Luna
Pero volviendo al tema que nos ocupa: LA LUNA. En términos jungianos representaría a nuestra madre, tiene mucho que ver con la relación con ella, incluso en la etapa de gestación, dentro de su útero ya nos transmitía sus sensaciones y emociones. Habla de maternidad de cómo percibimos a nuestra madre.
También está relacionada con las necesidades emocionales que tenemos que cubrir para sentirnos seguros, los instintos, el principio femenino que Carl Jung denominó “anima”. Aquello que nos nutre, nos alimenta y en definitiva nos recarga las pilas a nivel emocional.
Por otro lado, La luna también es el Alma, así como la manera de estar con nosotros mismos a solas. Por lo cual, según tengamos aspectada la luna con otros planetas en la carta astral, nos dirá si nos sentimos cómodos o incómodos.
Los aspectos son las relaciones que existen entre los planetas, a veces son compatibles y otras incompatibles.
Si la luna está mal aspectada, la persona está muy tensa, percibe una falsa imagen de sí misma, son personas inseguras, están incomodas tanto en soledad como en compañía, esa una desazón de no entenderse, estar inquieto… como dijo en una ocasión un astrólogo junguiano: “es como si el alma tuviese urticaria”.
Cuando la luna se siente bien aspectada, además de producirnos una gran seguridad a nivel energético, no da calma, sosiego, tranquilidad y una sensación de confort y placidez con nosotros mismo, en definitiva nos reporta una paz interior, que por supuesto se manifiesta en nuestra personalidad e imagen externa.
Cómo es nuestra luna
Considero muy interesante que sepamos “cómo es nuestra luna”, de esta forma seremos conscientes del porqué de nuestros sentimientos para con nosotros mismos y también respecto a nuestras parejas.
Hay 12 signos del zodiaco y 12 lunas, así mismo las podemos dividir en 4 grupos:
- Lunas de fuego: son lunas de acción e intuición. Aries, Leo y Sagitario
- Lunas de tierra: Son lunas de sensaciones, táctiles, percepciones sensoriales, muy terrenales Tauro, Virgo y Capricornio.
- Lunas de Aire: Géminis, libra y acuario. Son lunas de pensamientos, racionales, mentales.
- Lunas de agua: son lunas de sentimientos y emociones. Cáncer, Escorpio y Piscis.
Recuerdo en un taller de astrología, Juan Tolosa ponía un ejemplo muy divertido, y al mismo tiempo denota la importancia de conocer la luna de nuestra pareja y la propia, decía:
El chico luna en géminis, expresa sus sentimientos y emociones a través de la palabra, le deja notitas de amor, bajo la almohada, o le manda un sms diciéndole cuanto la ama…pero ella tiene una luna en tierra y piensa:
¿Qué haces este hombre dejándome notitas de amor? Yo lo que quiero es que me abrace, me bese y me acaricie!!!” Y es cierto, mucho de los problemas de las parejas están basadas en incompatibilidades de tipo emocional.
Otro ejemplo que se me ocurre
Sería un hombre con luna en Libra, es una persona de gustos refinados, cortés, de buenas maneras, muy correcto, con unos modales exquisitos, su prototipo de mujer seria Judit Mascó en el anuncio de los bombones, una señora, muy elegante, atractiva, elegante…
Para seducirlo adúlalo, haz que se sienta seguro, háblale de temas artísticos, pintura, poesía, no les apabulles de una forma directa, a ellos les gusta en cierto modo la ambigüedad, que les dé tiempo a pensar y racionalizar sus emociones.
¿Quieres quitártelo de encima, y que huya despavorido?: muéstrate, soez, vulgar, chabacana, no tratara de tocarte ni con un palo.
Considero que la astrología es una guía muy acertada, a la hora de solventar las incompatibilidades entre las parejas, y como arma de seducción, ¡ni te cuento!
Friedrich Nietzsche dijo:
“El ideal, se seduce a sí mismo el seducido, seria amar a la tierra como la ama la luna, y palpar su belleza únicamente con la mirada. Y el no pedir de las cosas más que poder estar tendido ante ellas…”
Relacionado
Cristina Marley | blogs.diariosur.es