En un mundo donde lo sencillo se ha convertido en inusual, donde lo grandilocuente, lo impostado, la exageración, la apariencia y el disimulo han tomado las riendas, ser unan persona que desprenda sencillez puede parece raro y confundirse con falta de glamour, de modernidad, timidez, etc.
Ser sencillo, no es sencillo — La importancia de la sencillez
Consejos para potenciar la cualidad de la sencillez
Cuándo todo se ha vuelto tan digitalizado y recibimos información por todas partes para mantenernos actualizados y movernos por la ciudad, por las autopistas, los aeropuertos, manejar el móvil, ordenador y hasta recorrer un supermercado es complicado por la cantidad de productos y oferta que te “invitan” a elegir entre tantas cosas que no necesitas, la sencillez parece un escudo protector para tanta novedad y complejidad.
Hay que potenciar la sencillez para no caer en la esclavitud del mundo de la moda, de la delgadez, las redes, las tendencias, la imitación, las copias, los clones…
Esto no quiere decir que no tengas tus preferencias ni que no te arregles y vayas de cualquier manera. Ser una persona sencilla es no necesitar ser quién no es.
La sencillez no es timidez, cortedad ni estupidez
Ser una persona sencilla es saber disfrutar de todo lo que te rodea sin necesitar nada extraordinario para estar a gusto.
La sencillez muestra entereza, sabiduría y fuerza interior. Al principio puede pasar desapercibida pero enseguida te das cuenta que tienes delante a una persona que no necesita de grandilocuencia ni artificios para demostrar quién es. Tanto en el interior como en el exterior, la sencillez es autoaceptación y autovaloración.
Para ser una persona sencilla sólo tienes que conocerte y aceptarte tal y como eres. En esta época de artificio, de tendencias, de influencer que marcan los cánones de cómo debes ser para tener éxito, es complejo ser una persona sencilla.
Así que quien a pesar de tanta sobre información de cómo se debe ser, y como se tiene que estar, se mantiene fiel en su sencillez, puede pasar desapercibida en el mundo mediático.
¿A quién le interesa ser como los demás?
Pues a personas que creen poco en sí mismas, con baja autoestima, falta de personalidad y puede que múltiples complejos. Tienes que saber que si quieres ser una copia del actor de moda, de la cantante de éxito, del YouTuber o del influencer, siempre vas a ser una mala copia de un original.
¿No seria mejor cultivar tus dones, tus cualidades y ser un original de ti mismo/a?
Te voy a dar tres consejos para potenciar la virtud de la sencillez.
Aleja el miedo
El desconocimiento de quien verdaderamente eres puede llevarte a las comparaciones y al miedo de no estar a la altura de los demás.
- Miedo a no ser aceptada/o
- Miedo al qué dirán si no eres como los demás
- Miedo a ser tu misma/o y ser rechazada/o por ello
- Miedo a no tener suficiente
- Miedo a quedarnos sin amigos
Todos esto miedos, y muchos más, hacen que dejes la sencillez para mostrarte diferente a lo que eres. Creas un personaje que se comportará como se espera de alguien más inteligente, con más dinero, más guapo, más simpático…¡alguien que no eres tú!
Esto te hará sufrir y te alejará cada vez más de la sencillez de disfrutar de quien eres y de todos los pequeños logros que has conseguido.
Aduéñate de tu mente
En tu mente comienza todo. Desde una mente sencilla puedes conectar con la sencillez de la vida sin distorsiones, ni exageraciones.
Tener sentido común es actuar desde una mente sencilla y clara. Una mente sencilla nos ayuda a no querer controlarlo todo y a entender a los demás sin imponerles nuestro punto de vista, nuestras ideas, ni nuestras creencias.
Desde una mente sencilla surgen palabras sencillas y claras, llamando a la cosas por su nombre, sin necesidad de grandilocuencia ni adoctrinar a nadie.
Cuando hay sencillez hay seguridad y surgen palabras claras sin doble intención ni necesidad de exagerar ni disimular que somos lo que no somos.
Elige bien tus relaciones
Que las relaciones nos pueden influenciar es un hecho. Si eres una persona sencilla los demás tendrán menos poder de influencia sobre ti.
Cuando te rodeas de personas diferentes, y muestra tu sencillez ante ellas, te darás cuenta de cómo te tratan, cómo te miran y si te sientes aceptada o rechazada.
Una persona sencilla tratará a los demás de igual manera sin tener en cuenta su condición, situación, posición, etc. Seguirá siendo ella misma a pesar de que todo lo que le rodea sea diferente.
La persona sencilla es la típica persona que cae bien a todo el mundo
Esto es principalmente porque no se compara, no se reta, no le interesa competir y porque su seguridad y empatía hacen que las relaciones sean amables y fluidas.
Con las amistades comparte tiempo y se alegra de todo lo bueno y de todos los logros que consiguen. Se comporta con sencillez en sus relaciones de la misma manera que lo hace en cualquier parcela de su vida.
Cuanto más sencilla es una persona más posibilidades de que sea mi amiga. ¡Bastante compleja soy yo dentro de mi sencillez!
Relacionado
Cualidades que comparten las personas que caen siempre bien
Monsalud Luque
Coach- Mentora | Psicoterapeuta | Jin Shin Jyutsu