Está próxima la llegada de Saturno al signo de Acuario, y en esta ocasión, año 2020, su entrada a dicha franja zodiacal estará acompañada de configuraciones planetarias fuera de lo común, que marcarán la diferencia con respecto a otras ocasiones.
Saturno en Acuario
En este año, Saturno tendrá dos entradas a Acuario, la primera ocurrirá el 22 de marzo. El 10 de mayo empezará a retrogradar, y por eso regresará a Capricornio el 1 de julio.
El 29 de septiembre se pone directo y avanza de nuevo, y así llegará a Acuario otra vez el 17 de diciembre, y se quedará recorriendo este signo, hasta el 7 de marzo de 2023, cuando saldrá de la zona acuariana para no volver allí hasta el 2050.
Por lo pronto, dentro de poco más de mes y medio, Saturno entrará a Acuario y viviremos su efecto por espacio de algo más de tres meses; y a final de año, cuando vuelva a entrar a este signo, su efecto se desarrollará por espacio de dos años y casi tres meses.
Saturno en Acuario está en su segundo domicilio
(Su primera casa es Capricornio). En la antigüedad, cuando Urano no había sido descubierto, era el astro de los anillos el regente de la franja uraniana; una vez conocido Urano, se le adjudicó esta regencia, y Saturno quedó solamente como regente de Capricornio.
Las características de Saturno, aparentemente cuadran más con Capricornio, que es formal, disciplinado, estructurado, que con Acuario, que es inconvencional y rebelde; sin embargo, si buscamos más allá, podemos encontrar algunas conexiones interesantes.
Relación de Urano con Saturno
Desde el punto de vista mitológico, por ejemplo, llama la atención la relación de Urano con Saturno, pues en la mitología griega, Cronos (Saturno), se alza contra su padre que es Urano, y lo destrona como Rey del Olimpo.
Bien podríamos pensar en Saturno gobernando en los predios de Urano, como es Acuario, y de alguna forma, se le hace justicia a este último, cuando los astrólogos “destronan” a Saturno y le devuelven a Urano su gobierno.
Saturno es el astro de la Sabiduría, el Maestro
Desde el punto de vista de las características astrológicas, tiene sentido la regencia antigua de Saturno sobre Acuario, pues la palabra clave de este signo es “Yo conozco”, porque Acuario tiene sed de conocimiento, y a la vez, Saturno es el astro de la Sabiduría, el Maestro.
Por otra parte, Saturno tiene la cualidad de estructurar, y esta característica le es muy necesaria a Acuario para que su genialidad creativa, que es desordenada, se canalice y llegue al mundo de lo concreto.
Acuario es el visionario que imagina la llegada del hombre a la Luna, tal como hizo Julio Verne en su relato, pero con la regencia de Saturno, esa visión se concreta, se desarrolla la tecnología y se logra hacer realidad toda esa visión creativa.
La energía acuariana bien la podemos asociar a esos sueños futuristas, como en las antiguas historietas donde los teléfonos con pantalla para ver al interlocutor eran cosas de ciencia ficción, al igual que los ambientes computarizados. La realidad ahora supera a la fantasía en muchos casos, y las nuevas tecnologías van en aumento.
Saturno en Acuario es la disciplina
El conocimiento, la tecnología, todo eso puesto a disposición del potencial creativo, innovador y vanguardista de la franja acuariana, y por eso, Saturno desarrolla sus cualidades en forma muy cómoda, en este signo.
Con Saturno en Acuario es de esperar grandes avances en materia de tecnología, y el establecimiento de modelos de sociedad más avanzados, o en todo caso, donde se impulsen cambios a fondo, y modernización de las estructuras.
Decíamos que en esta ocasión, la entrada de Saturno a Acuario, estará acompañada de otras configuraciones planetarias que harán de 2020 un año fuera de lo común.
La primera entrada de Saturno a Acuario
Coincidirá con la formación de la conjunción de Júpiter con Plutón, que generará un impulso energético de pronóstico reservado en las finanzas públicas, las estructuras políticas y sociales, los liderazgos y el mundo petrolero; posteriormente, luego de regresar a Capricornio, Saturno en su nuevo avance llegará otra vez a Acuario, pero esta vez lo hará en compañía de Júpiter.
EL solo hecho de la unión de estos dos astros es indicativo de que está por nacer, en muchas partes del mundo, un nuevo modelo de sociedad, pero resulta aún más acentuada esta tendencia cuando esta conjunción ocurre en el vanguardista signo de Acuario.