Una mujer con autismo y epilepsia intenta crear conciencia respecto a la labor de los animales de servicio, después de que su perro Raider intentó conseguirle ayuda y fue rechazado. “Si un perro de servicio sin una persona se te acerca, significa que la persona está incapacitada y necesita ayuda. No te asustes, no te molestes, ¡sigue al perro!”, indica el mensaje publicado por Tessa Connaughton en la red social Tumblr.
Qué hacer cuando un perro de servicio te pide ayuda
De acuerdo con Huffington Post, la joven de 20 años obtuvo a Raider hace poco más de dos años y lo entrenó para ayudarla, pues padece autismo. Cuando se siente abrumada, el animal le suministra terapia de presión recostándose sobre ella, lo que le ayuda a recobrar la calma.
Hace un par de meses, la originaria de California fue diagnosticada con epilepsia, por lo que Raider recibió más entrenamientos para ayudar a su ama con esta condición.
“Queremos que pueda voltearme de lado, presionar un botón de alerta que traeré conmigo y proteger mi cabeza”, explicó Connaughton.
Los entrenamientos apenas empiezan, por lo que la joven enseñó a su mascota a seguir un protocolo temporal: dejarla y buscar a otra persona en caso de convulsiones, en lugar de quedarse a su lado y ladrar. “Los ruidos fuertes son dolorosos para mí, especialmente cuando ya estoy en una situación difícil”, explicó.
La semana pasada, la joven se encontraba en un supermercado cuando se resbaló y cayó. Raider asumió que estaba convulsionándose y fue a buscar ayuda. Ella reaccionó poco después y buscó a su perro, a quien encontró tratando de llamar la atención de una mujer que solo reaccionó molesta.
“Ella estaba golpeando levemente su nariz y diciéndole que la dejara sola mientras hacía sus compras. Me llamó la atención que si ella no entendía qué era lo que (Raider) intentaba, mucha gente probablemente tampoco sabría”, relató Tessa, quien compartió posteriormente su historia para crear conciencia.
El texto de Connaughton se ha vuelto viral pero también ha sido criticado por personas que consideran que entrenar a un perro para abandonar a la persona y buscar ayuda es impráctico.
“Hay miles de formas de entrenar a un perro de servicio. Vivo en una ciudad pequeña con muchos habitantes, y mi método funciona para mí”, concluyó.