Durante la colonización ibérica y la evangelización de los siglos XV y XVI, los frailes -principalmente franciscanos- llevaron el pesebre al Nuevo Mundo.
Origen e historia del pesebre de navidad o nacimiento
La práctica de representar el nacimiento de Jesús en imágenes tiene sus raíces en el siglo XIII y fue iniciada por San Francisco de Asís.
Se dice que el predicador, pobre y vestido con harapos, se vio sorprendido por el crudo invierno mientras predicaba en la campiña italiana, cerca de Rieti. Buscó refugio en la ermita de Greccio. Se acercaba la Navidad de 1223.
Se sintió atraído por recrear el misterio del nacimiento de Jesús en Belén mientras contemplaba la lectura del Evangelista San Lucas y rezaba en la paz del bosque.
Levantó una pequeña estructura de paja como portal, la llenó con un pesebre, pidió prestados un buey y un burro a los campesinos del vecindario e invitó a algunos de ellos a representar la escena de la adoración de los pastores.
San Lucas, capítulo 2, versículos 2 al 14
La hermosa noción se extendió rápidamente por la Europa católica, primero a España y luego al resto de Europa. Los protagonistas del significativo acontecimiento descrito en el capítulo 2, versículos 2 a 14, del Evangelio de San Lucas, fueron recreados en figuras de arcilla en Nápoles a finales del siglo XV. El fragmento dice así:
En aquella época, el emperador dictó una ley que ordenaba hacer un censo en todo el imperio. Cuando Quirino era gobernador de Siria, se realizó el primer censo. Todos viajaron a sus respectivas ciudades para empadronarse.
Siendo descendiente de David, José también dejó Nazaret en Galilea y viajó a Belén, en Judea, para empadronarse con María, su esposa, que esperaba un hijo.
El momento del parto llegó cuando estaban en Belén. Como no había sitio para ellos en la sala común, dio a luz a su primogénito, lo envolvió y lo colocó en un pesebre.
En la zona, los pastores se turnaban para vivir en los campos durante el día y cuidar de sus rebaños por la noche. Les sobresaltó la aparición del ángel del Señor y la gloria del Señor rodeándoles.
Sin embargo, el ángel les dijo
No temas, porque he venido a traerles una buena noticia que hará muy felices a todos. Cristo el Señor, nuestro Salvador, ha nacido hoy para ustedes en la ciudad de David.
Verán a un recién nacido acostado en un pesebre, envuelto en pañales, y así podrán identificarlo. Gloria a Dios en las alturas y en la tierra, gracia y paz a los hombres, cantó un gran número de seres celestiales que aparecieron de repente alrededor del ángel.
Interpretaciones alegóricas del belén
Los frailes recrearon representaciones alegóricas del belén tras su llegada a América en los siglos XV y XVI.
Según la imaginación y los recursos de cada comunidad cristiana, se incluyeron variaciones del belén en cada pueblo latinoamericano, así como en las zonas de lo que hoy es Estados Unidos que fueron ocupadas por España. Estas escenas se acompañaban de villancicos alegóricos al pesebre.
Para elevar la devoción navideña, la Iglesia católica promovió representaciones bíblicas de la Natividad del Niño Jesús en iglesias, hogares y espacios públicos. Acostado en un pesebre, envuelto en pañales, y así podrán identificarlo.
Gloria a Dios en las alturas y en la tierra, gracia y paz a los hombres, cantó un gran número de seres celestiales que aparecieron de repente alrededor del ángel.
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