¿Te sientes agobiada, estresada, agotada, ansiosa y además sólo comes y nada te relaja? ¿Será que estás abusando de los colores brillantes como el rojo y el naranja y de la computadora y aparatos eléctricos?
Tips para lidiar con el estrés y la ansiedad
Este puede ser uno de los motivos de tu estrés y ansiedad lo que reflejas en problemas constantes en tu trabajo, tu familia y con tus amigos…
Así que si quieres relajarte y mejorar tu vida comienza consintiéndote y apapachándote…
Quiero compartir con ustedes puntos clave para obtener un buen balance energético a través de su entorno y de manera personal para lidiar con el estrés y la ansiedad.
El estrés y la ansiedad son consecuencia de un exceso de actividad que puede ser provocada por abusar de los tonos rojos, naranjas o amarillos brillantes. También el depender tanto de aparatos eléctricos y la tecnología te lleva a saturar tus sentidos de excesos de energía que tu cuerpo no sabe como canalizar o drenar.
Establece horarios para cada cosa
Date el tiempo para caminar descalza en un jardín, el contacto con la tierra te servirá para descargar el exceso de energía que acumulas.
Consume frutas, vegetales verdes y bebe líquidos para balancear tu energía, evita abusar de las carnes rojas o alimentos muy condimentados.
Integra plantas naturales en tu entorno
Principalmente en las esquinas. Son excelentes para suavizar la energía y acabar con atmósferas estresadas.
Báñate con sal de mesa, exfoliándote la piel, liberará tu energía y te sentirás más relajada.
Suena campanas en las esquinas de tu casa para eliminar la energía atorada y estancada.
Decora tus macetas con cuarzos
Las piedras absorben y sanan la energía de un lugar. Un detalle primordial: evita enchufes a los lados de la cabecera de tu cama o dormir cerca de torres de luz o transformadores eléctricos.
Coloca una cobija de lana entre la base y el colchón de tu cama y coloca un gallo en escultura dirigido con el pico hacia el transformador.
¿Qué tiempo es recomendable cambiar las sábanas de nuestra cama?
Una de las labores domésticas que la mayoría odiamos es tender la cama, y peor aún, tener que cambiar las sábanas, ponerlas a lavar y a secar, algo que aunque no lo creas, debes de hacer más seguido de lo que crees por tu propio bien.
