La espiritualidad es un viaje interior hacia la comprensión profunda del ser y el universo. Es la búsqueda de conexión con lo divino, trascendiendo lo material. A través de prácticas espirituales, se busca la paz interior y el crecimiento personal.
Te des cuenta o no, todo lo atraes a ti a través de tu imaginación. El poder de la imaginación no es algo que debes adquirir, ¡tu ya lo tienes! Piensas en imágenes aun si eres consciente de ello o no, y usas tu imaginación cada día de tu vida.
La Ley de la Atracción responde, SIEMPRE, a las vibraciones que emitimos con nuestros pensamientos. El rico es cada día más rico porque aumenta su consciencia de riqueza, mientras que el pobre es cada día más pobre porque aumenta su consciencia de pobreza.
El silencio hace posible la escucha y el diálogo auténtico, abriéndonos al encuentro del otro. En nuestra sociedad todos hablan pero pocos escuchan. Vivimos en un diluvio de palabras vacías, sobrepasados por millones de palabras, ruidos e imágenes que nos llegan por todas partes y que nos persiguen hasta los pocos..
Cada vez que estés ante una persona y te sientas negativo, sea la emoción que sea… cada vez que estés viviendo una situación concreta que te produzca dolor, tristeza, rabia o cualquier emoción de las que etiquetamos como negativas, recuerda que la culpa no es ni de la otra persona ni de la situación…
Si los seres humanos nacemos buenos, es decir con la capacidad para hacer el bien, solo necesitamos centrarnos en esa cuestión. Hemos venido a esta Tierra a hacer el bien al prójimo. No hay ningún otro propósito. Para hacer el bien, necesitamos empezar por una acción muy sencilla..
Cuando eres fuerte pero estás cansado, tu fe se vuelve cautelosa. Crees en el amor, pero también lo temes. Esperas con ansias algo que ni siquiera ves que está en tu futuro. Cuando todo lo que has experimentado es angustia, se necesita fuerza para creer en cualquier otra cosa.
