El Séfer Yetsirá o Libro de la Formación, escrito hace aproximadamente 4000 años por Avraham el Patriarca, fue el primero en revelar información sobre las estrellas, los planetas y el modo en el que estos nos afectan.
Astrología Cabalística — Diferencia entre la Astrología Convencional
También habla del ADN no solo del universo, sino del alma; según Avraham, este ADN del alma nos pone en el camino que más nos ayuda a transformar nuestro deseo de recibir en deseo de compartir y a alcanzar plenitud en esta vida.
ADN Espiritual
La posición de los planetas y las estrellas en un momento y lugar de nacimiento determinado, nuestra carta astrológica, puede darnos gran conocimiento sobre nuestro ADN espiritual.
El calendario cabalístico es lunisolar, es decir, los meses están basado en ciclos lunares y los años en ciclos solares, cada mes se corresponde con uno de los doce signos del Zodiaco.
Y aunque la astrología cabalística y la astrología convencional (la más común en la sociedad) compartan los nombres de los signos zodiacales, hasta ahí llegan las características comunes.
Astrología Convencional vs Astrología Cabalística
La astrología convencional nos dirá que nuestra personalidad y nuestra vida están predeterminadas por la posición de los planetas y las estrellas; la astrología kabbalística nos dice algo completamente diferente.
Rav Berg dijo: “Todo lo que está escrito en las estrellas puede ser modificado”. La Cábala enseña que las elecciones que hicimos en vidas pasadas determinaron el punto de inicio de esta vida, y nuestras elecciones en esta vida determinarán el punto final. Por lo tanto, podemos tomar decisiones y nuestro destino está en nuestras manos.
Venimos a esta vida para corregir los errores que cometimos en las vidas pasadas y nuestra alma elige el momento exacto que nos ofrece la mejor oportunidad para: alcanzar algo llamado tikún (o corrección espiritual), tomar decisiones diferentes y superar las limitaciones que previamente impidieron el crecimiento de nuestra alma.
Así pues, la astrología cabalística dice que nuestras vidas no son determinadas por la posición de los planetas, sino que la posición de los planetas es determinada por nuestras vidas.
Atributos positivos y negativos
Por ende, los signos bajo cuya influencia nacimos son como un mapa que nos muestra tanto nuestras fortalezas como las cosas que vinimos a corregir.
Por ejemplo, los nacidos bajo el signo de Leo tienen la increíble capacidad de influir en muchas personas, pero necesitan cuidarse de ser dirigidos por su ego a fin de ser un canal puro para la Luz.
Y Géminis, quien tiene el don de la sabiduría, también tiende a tener problemas con el compromiso o terminar lo que empieza. Entonces, alguien nacido bajo el signo de Géminis sabría que es importante concentrarse en comprometerse con algo y llevarlo a cabo.
Cuando entendemos esto, vemos que no hay aspectos “malos” en nuestra carta astrológica, solo oportunidades diferentes.
La astrología cabalística nos permite estar conscientes de estas oportunidades, lo cual hace que sea más fácil que logremos nuestra corrección, borremos la negatividad que creamos en el pasado y, en esencia, nos convirtamos en la causa de nuestra propia plenitud.
Sabiduría más profunda
- ¿Cómo sabemos cuáles son las influencias positivas y negativas de cada signo?
- ¿Cómo podemos identificar cuál es nuestro tikún según nuestro signo astrológico?
Los cabalistas enseñan que las veintidós letras arameas, las mismas usadas en hebreo, son las bases que componen a todo el universo. Cada letra revela un aspecto de la Creación y, por lo tanto, es como el ADN de cada uno de los doce signos astrológicos.
Dos letras arameas componen cada mes: una está relacionada con el planeta regente y la otra con su signo correspondiente (por ejemplo, las dos letras relacionadas con Aries son Hei, que creó al signo de Aries, y Dálet, que creó a Marte, el planeta regente de Aries).
Cada letra tiene su propia energía, regalos y atributos positivos y negativos, así pues, es tanto la Luz que brilla sobre nosotros durante el mes como la razón por la que el signo provee fortalezas y debilidades únicas a quien nace bajo su influencia.