Formas de aplicación
Cataplasmas para uso externo: Es la manera más inmediata y fácil de utilizar la arcilla, sin ningún peligro.
Con palabras de la doctora Muller: «La acción desinfectante de la arcilla unida a su capacidad de regeneración rápida de los tejidos la hace irreemplazable, incluso en los tratamientos de ulceraciones de todo tipo como el eccema, la psoriasis, etc.».
Efecto de la ingesta de arcilla
«Cualquier posible similitud entre la arcilla y los medicamentos químicos será sólo aparente, pues existe una diferencia básica entre la acción antiséptica de la arcilla y la de las sustancias químicas.
Todo producto químico es materia muerta que actúa ciegamente y destruye todas las bacterias de manera indiscriminada, las buenas y las malas, las sanas y las enfermas, las beneficiosas y las dañinas.
Es posible que de ese modo se consiga exterminar los gérmenes peligrosos pero no se respeta a los elementos que favorecen la reconstrucción de células y tejidos.
Un hecho evidente es que la arcilla usada internamente, en absorción oral, anal o vaginal, actúa con enorme sabiduría, se dirige siempre a la zona dañada o enferma, donde se aloja quizá durante varios días y finalmente se evacuan, arrastrando consigo el pus, la sangre podrida, etc.» Raymond Dextreit, Nuevo tratado de medicina natural.
Tomada por vía oral, la arcilla provoca un efecto multilateral. Su intensa actividad elimina y destruye las células enfermas y activa la reconstrucción de otras sanas, actúa como agente depurador que elimina toda clase de sustancias nocivas.
Tiene efecto sedante, relajante y curativo en el tratamiento de las inflamaciones intestinales, amébicas y otras disenterías.
Pero más allá de la acción directa e inmediata de la arcilla sobre el aparato digestivo, que contribuye a eliminar numerosos cuerpos extraños incluidos los gases, su actividad influye sobre todo el organismo. Toda radiación negativa es atraída por la arcilla y eliminada.
Preparación
Dextreit afirma que la arcilla debe emplearse en dosis relativamente pequeñas, como su acción se debe a sus radiaciones y no a que contenga cantidades mayores o menores de determinados elementos es inútil tomar grandes cantidades. Debe utilizarse con prudencia, sobre todo en uso interno.
La dosis media es de una cucharadita diaria para los adultos. Para los niños menores de 10 años la dosis es de media cucharadita diaria.
Para uso interno conviene elegir arcilla fina. Debe prepararse varias horas o una noche por adelantado, vertiendo una cucharadita de arcilla en medio vaso de agua, y beberse por la mañana inmediatamente después de levantarse o por la noche al acostarse.
Dextreit establece en 3 semanas la duración del primer tratamiento con arcilla. Tras una semana de descanso se reanuda el tratamiento, que continúa durante los meses siguientes al ritmo de una semana de tratamiento y otra de descanso alternativamente.